-A estas horas hace 27 años estábamos comiendo macarrones cuando rompí aguas... Así comienza mi madre su relato, como todos los años de mi vida, a la hora del almuerzo. Como toda madre, lo recuerda con gran orgullo y cierta nostalgia al ver que su niña ya no es tan niña.-Tenías unos dedos finísimos y naciste con las palmas abiertas, por eso rompiste la bolsa antes de tiempo, porque la pinchaste con los dedos... Continua mi padre completando partes de la historia. Cada cual tiene su parte y ambos disfrutan recitándola "como si fuese ayer", como dirían ellos.
Pues eso, un año mas viejuna.